Con el objetivo de reducir el riesgo para la salud de los consumidores, una de las medidas que se han tomado es la de regular la entrada de productos fabricados en China. Una de esas regulaciones es el Reglamento REACH, un reglamento que se encarga de controlar la entrada de productos químicos con el objetivo de proteger la salud de las personas y la contaminación del medio ambiente. Las siglas REACH corresponden con todo el proceso de este reglamento, registro, evaluación, autorización y restricción de las sustancias y preparados químicos. El 1 de junio de 2007 empezó a aplicarse esta normativa y sigue estando en rigor.
El ámbito de aplicación de REACH es muy amplio, cualquier producto fabricado debe cumplir con esta regulación. No sólo los productos químicos utilizados en el proceso industrial, sino también productos de uso diario que pueden poner en peligro la salud humana y el medio ambiente.